Lo que inició el domingo pasado en San Andrés como unas vacaciones de ensueño para Alejandra Montenegro, terminó siendo un viacrucis porque Aquiles su perro ‘Border Collie’ de cuatro años, a quién trajo de compañía, escapó de la posada en el barrio Morris Landing donde esperaba que volviera de un tour al que se fue con su hermana.
No vayan a creer que Alejandra, no es responsable y que un perro solo se pierde por descuido de su dueño, porque lo ocurrido con Aquiles, es una situación extraordinaria y todos los involucrados sufren en diferentes grados de responsabilidad, pero no por una conducta dolosa o desinteresada.
“Lo dejamos en la habitación para ir al tour, como cuando me voy para el trabajo y vuelvo hasta la tarde, le di antes su comida, agua, lo saqué a pasear, pero al parecer cuando nos fuimos empezó a ladrar y el dueño de la posada creyó que le pasaba algo, abrió la puerta para tranquilizarlo y se escapó”, comentó Alejandra, quien lleva días de intensa búsqueda, entre la desesperación, el llanto y la esperanza.
Todo un movimiento solidario por el reencuentro de Alejandra y Aquiles se ha movilizado como una fuerza rastreadora por las calles de Morris Landing y la Carretera Circunvalar. Han recorrido La Loma, el Cove, a pleno sol y hasta las 2 de la madrugada llamando su nombre: ¡Aquiles!, ¡Aquiles!, por si acaso está escondido entre la maleza.
El ISLEÑO se suma a este sentimiento solidario para devolverle la alegría que vino a perder en el paraíso Alejandra, si lo ven por favor comunicarse con el celular +57 320 8590477 hay una excelente recompensa.