La Constitución de 1991 y el Acuerdo de paz con las FARC, son los dos hitos de la historia reciente del país que demuestran que los colombianos sí somos capaces de ponernos de acuerdo en temas fundamentales. Ese conciudadano siempre afanado y aislado en sus regiones, ha encontrado formas de asegurar consensos que le han representado avances en la dirección correcta.