El 2025 inició con una serie de precipitaciones sobre el archipiélago que han sorprendido tanto visitantes como residentes. De acuerdo a la información de los organismos de socorro este periodo es, históricamente, de predominancia del tiempo seco, por lo que las lluvias son un fenómeno sorpresivo.
Si bien no se han reportado personas heridas, el clima de estos días en el territorio insular ha causado algunas emergencias como el desprendimiento de parte del techo del área de consulta externa del Hospital Departamental; fuera de esto, según comenta el cuerpo de bomberos, no se ha tenido un caso tan representativo.
Como parte de las estrategias para afrontar esta época catalogada como atípica, las autoridades locales hacen un llamado a la población a mantener la calma, informarse por los canales oficiales y evitar caer en alguna red de desinformación que pueda generar pánico entre la población.
Igualmente, un hecho en particular que considera el Cuerpo de Bomberos de San Andrés es que al parecer algunas personas estarían depositando de manera errónea la basura, tanto en horarios como en lugares, esto deriva en que los residuos son arrastrados por las corrientes de agua y llegan a los canales de evacuación de lluvias, taponándolos y generando inundaciones.
Ojo a los residuos sólidos
“Históricamente en enero no tenemos la cantidad de precipitaciones que hoy se presentan. Extendemos el llamado a todos los habitantes a no dejar las basuras en sitios que puedan ser arrastrados por agua, deben sacarlas sólo si el carro recolector está en su zona”, dijo Willie Gordon Bryan, Comandante del Cuerpo de Bomberos de San Andrés.
Del mismo modo, acotó Bryan, otro de los temas a tener en cuenta es la limpieza de las vigas canales, las cuales muchas veces no se les realiza mantenimiento y propician filtraciones que culminan en el colapso de algunas estructuras como cielos rasos o techos, poniendo en riesgo la vida de las personas.
“Ese es uno de los males que estamos viviendo en el departamento. No hacer limpieza de las vigas canales afecta de sobremanera las estructuras, las cuales se llenan de agua y ceden. Hay que hacer el monitoreo constante de esto”, comentó.
Igualmente, por ahora está descartada la estrategia de podas preventivas, sin embargo, tal cual expresa el funcionario, no se debe bajar los brazos en ningún momento, y por eso la importancia de atender las recomendaciones por parte de las autoridades locales.
“Las podas de árboles no son tan urgentes en este momento. Nos enfocamos en el manejo de las aguas lluvias, las cuales están causando emergencias en muchos casos por negligencia de nosotros como comunidad”, concluyó.