La Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago (Coralina) informa a la comunidad sobre la detección del caracol gigante africano (Lissachatina fulica), en varias zonas de la isla de San Andrés. De acuerdo con la entidad, es una especie muy peligrosa y considerada invasora.
Según el boletín expedido por la autoridad ambiental, este molusco ha colonizado tanto áreas rurales como urbanas, representando una seria amenaza para la agricultura, el medio ambiente y la salud pública.
Características
El caracol gigante africano es fácilmente identificable, por sus bandas longitudinales de color crema y marrón en una concha cónica alargada, que puede tener de cinco a siete vueltas.
Su cuerpo es de color marrón oscuro, con piel gomosa, alcanzando una longitud de hasta 28 cm cuando es adulto.
Esta especie ha colonizado ambientes antrópicos, incluyendo jardines, viveros, invernaderos y viviendas, y actualmente se ha reportado en diferentes puntos de San Andrés.
Su presencia es alarmante debido a su capacidad para destruir cultivos, afectar ecosistemas naturales y actuar como vector de enfermedades que pueden ser transmitidas a los humanos.
Riesgos para la salud
Este animal actúa como vector de nematodos del género 'Angiostrongylus', que pueden causar meningitis eosinofílica en humanos. Estos parásitos, presentes en los pulmones de ratas, pueden ser transmitidos por la ingestión de caracoles, el contacto directo con ellos o el consumo de alimentos sin lavar.
Por lo anterior, Coralina hace un llamado a la comunidad a seguir los siguientes pasos en caso de encontrar este tipo de caracol:
1. Captura: utilice guantes o una bolsa de plástico para evitar el contacto directo con el caracol, los cuales deben ser desechados una vez finalice su uso.
2. Eliminación segura: Coloque el caracol en un recipiente plástico o metálico que contenga alcohol, cloro diluido en agua con sal, o simplemente sal y tape herméticamente.
3. Disposición final: Una vez capturado, el caracol debe ser colocado en un contenedor metálico para su incineración o entregado a las autoridades competentes.
4. Higiene personal: Después de manipular el caracol, lave cuidadosamente sus manos y antebrazos, y evite que la baba del caracol entre en contacto con las mucosas de los ojos, nariz y boca.
5. Evite el uso de insecticidas: estas sustancias no son efectivas para eliminar esta plaga, ya que las bacterias presentes en la baba del caracol pueden sobrevivir durante varios meses.
Llamado a la acción
La Corporación Ambientan insta a la población a reportar cualquier avistamiento del caracol gigante africano y a colaborar en su control, ya que la presencia de esta plaga amenaza tanto los ecosistemas locales como los medios de vida de la población.
El compromiso de todos es fundamental para prevenir la propagación de esta especie y mitigar sus impactos negativos.
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