Naciones Unidas (ONU) declaró el 20 de mayo como el Día Mundial de las Abejas, para crear conciencia sobre la importancia de estos polinizadores y para afianzar las estrategias que enfrenten las amenazas a las que están expuestos. Habla César Palacio Santos, exponente de la apicultura isleña, quien también se ha visto afectado por uno de los enemigos de esta valiosa labor: las fumigaciones.
De acuerdo con la ONU, tres de cada cuatro cultivos de frutas o semillas que se producen para consumo humano dependen, al menos en parte, de las abejas y de otros polinizadores como las mariposas, los murciélagos y los colibríes. Es decir, dependemos de la supervivencia de ellos para poder tener alimentos.
Dicha organización recalca, que casi el 90% de las plantas con flores dependen de la polinización para reproducirse; y que el 75% de los cultivos alimentarios del mundo dependen en cierta medida de ella.
Sin embargo, las abejas están cada vez más amenazadas por los efectos de la actividad humana y corren el peligro de extinguirse, debido a la destrucción de sus hábitats, al uso de plaguicidas y al cambio climático.
Otras cifras de ONU revelan, que las tasas actuales de extinción de especies son muchas veces más altas de lo normal, debido a las repercusiones humanas, y que casi el 35% de los polinizadores invertebrados (en particular las abejas y las mariposas), y alrededor del 17% de los polinizadores vertebrados (como los murciélagos), están en riesgo de desaparecer en todo el mundo.
Es por ello que esta fecha supone una oportunidad para que gobiernos, organizaciones, sociedad civil y ciudadanía interesada, promovamos acciones que protejan a los polinizadores y a sus hábitats; que incrementen su abundancia y diversidad; y que apoyen el desarrollo sostenible de la apicultura.
Miel ‘made in’ San Andrés
Igualmente, es relevante en una fecha como esta exaltar la labor de César Palacio Santos, quien por más de 20 años de investigación y trabajo decidido, ha dado impulso a la producción de miel, propóleo, polen y jalea real con sello isleño, bajo la marca ‘Honey Land’.
Este apicultor es ampliamente conocido, en el continente colombiano y en otras latitudes, también como productor de abejas reinas y por ser el creador del ‘Método Palmer' (versión San Andrés), que tras más de 10 años de observación e investigación, ha logrado ser mejorado y replicado en varios países de Latinoamérica.
Según explica el productor, a diferencia del método que empleaba el estadounidense Michael Palmer (de ahí viene el nombre), donde la colmena estándar era dividida en dos secciones, con una reina a cada lado y alzas (cajones) superiores de miel para la producción, su variante consiste no en dividir la colmena, sino en convertirla en un ‘banco’ de miel con colmenas de cuatro cuadros (panales).
Con esta modificación –asegura– la diferencia en la producción de miel es notable. Además, facilita el trabajo de una mujer que ya no tiene que cargar 30 o 40 kilos que pesa una caja estándar, sino que con la variante el peso se reduce a 17 k.
Grandes satisfacciones
Palacio Santos aseguró que el año pasado fue el mejor de su vida vida en cuanto al trabajo con abejas, dado que asistió al 48º Congreso Internacional de Apicultura ‘Apimondia’ en Chile; y también al Congreso Centroamericano y del Caribe, en Panamá
En cuanto al encuentro en Chile, recordó la anécdota negativa que tuvo también en 2023 cuando le fue desconocida su condición de raizal y ello le produjo una baja puntuación en una convocatoria del Ministerio de Agricultura para acudir, con patrocinio, a ese congreso que se realizó del 4 al 8 de septiembre.
“Muy a pesar de ese sinsabor, como sé que soy referente de la apicultura, con mi propio esfuerzo viajé a ese gran evento; y lo más bello es que me encontré con Michael Palmer, mi máximo referente mundial; en mi concepto, el gurú de la apicultura norteamericana y de quien desarrollé una versión mejorada de su método”, comentó emocionado.
El productor añadió que no sólo conversó con el estadounidense, sino que él lo nombró dos veces durante su ponencia, reconociendo la evolución de su método gracias al empeño investigativo del sanandresano. “Fue una emoción indescriptible”, aseguró.
De igual forma, comentó que le causó mucha satisfacción que tanta gente del gremio lo reconociera, como fruto de su labor continuada y de la vigencia de su método; tal fue el caso de otro destacado apicultor, el peruano Amadeo Caballero, con quien se topó en dicho Congreso.
Un 2024 no tan positivo…
Luego de un 2023 tan satisfactorio, este 2024 no lo ha sido tanto para Palacio Santos, puesto que –afirma– que a causa de las fumigaciones contra el zancudo ‘aedes aegypti’ (causante de enfermedades como el dengue, chikunguña o zika) en la isla, resultaron afectadas la mitad de sus colmenas.
“Aquí se sigue fumigando año a año para exterminar el zancudo, sin resultados visibles; pero, por el contrario, aniquilaron la mitad de mis colmenas. Actualmente estamos en reconstrucción y nos vamos a demorar mínimo un año en la recuperación, porque hay un apiario que perdió un 70% de los bancos de miel, que son importantísimos”, manifestó.
A raíz de lo ocurrido, el apicultor recordó que existen formas de controlar plagas biológicamente; máxime en un territorio que se precia de ser reserva de biosfera de la humanidad.
“Somos una zona para proteger la vida y debe tenerse en cuenta que si existe una plaga, debe buscarse la manera de cómo controlarla biológicamente. En vez de fumigar con pesticidas, podría erradicarse ese vector, sin tanto perjuicio, con la ‘notonecta’: un insecto que se come la larva de los zancudos”, explicó.
En la actualidad, el productor está sacando los materiales malos de las colmenas y tratando de recomponer las estructuras, base de su trabajo diario y aquellas que le ha costado tanto implementar. Aún visiblemente afectado por lo ocurrido, enfatizó en que al tener un 50% menos de abejas, este año él no es sostenible económicamente.
“Afortunadamente el año pasado tuve buena cosecha y tengo una reserva en la bodega, lo que me ha permitido sostener la sustentabilidad del emprendimiento modelo para una reserva de la Biosfera", concluyó Palacio Santos.