El Defensor del Pueblo, Fidel Corpus Suarez, llamó la atención de las autoridades ante las condiciones de insalubridad en el cual se mantienen 46 ciudadanos de Nicaragua tripulantes del pesquero Capitán Javi interceptados por la Armada Nacional faenando ilegalmente en aguas jurisdiccionales del país.
La Armada Nacional ofreció a las autoridades del país centroamericano devolver a sus conciudadanos hasta el Meridiano 82, pero no fue posible ya que el vecino país aduce desconocer ese límite territorial, dijo Corpus Suarez, tras entrevistarse con el Capitán de Navío Carlos González Corrales.
El propietario de la embarcación, Carlos Goff Amador, llegó a solucionar el problema de la motonave, la tripulación y los pescadores. Estos afrontan por separado procesos jurídicos ante la Capitanía de Puerto de San Andrés y ante la Secretaría de Agricultura y Pesca.
El representante del Capitán Javi dijo al Secretario de Agricultura y Pesca, Clinton Pomare James, que las multas superarían el valor comercial de la embarcación.
Así las cosas va siendo tiempo de plantear una solución de fondo a esta situación y muchas otras similares que se vienen presentando con los pescadores ilegales de países vecinos. Nicaragüenses, hondureños y jamaiquinos, entre otros, se han convertido en un verdadero dolor de cabeza para San Andrés.
Si bien es loable ejercer el control soberano de nuestros mares y la protección de sus recursos ictiológicos, también sería práctico y necesario revisar las condiciones logísticas y reglamentarias con las que contamos para garantizar esos procedimientos.