La historia oficial

Imprimir

ARMADA1

Uno de los argumentos que con mayor vehemencia esgrimen los defensores de la reconstrucción del llamado ‘Monumento al Barco’ de San Andrés es el supuesto rescate higiénico y social del estratégico lugar por cuenta de la Armada Nacional. Más de uno se dá golpes de pecho al afirmar que este sitio era poco menos que un chiquero antes de dicha intervención.$(FOTO ARCHIVO)

Pues ocurre, para el ‘naufragio’ de la mencionada teoría, que dicho testimonio –de por sí impreciso para respaldar una4trasformación en lugar de una4restauración– está sustentado en un craso error histórico toda vez que desde hace más de un lustro, la misma Armada Nacional en un acto altruista decidió y anunció adoptar el monumento público.

En efecto, en noticia publicada por este periódico el lunes 21 de noviembre de 2011, bajo el título de ‘Armada Nacional adopta monumento al barco’; el Capitán de Navío Carlos González Corrales anunció que la institución adelantaba “la restauración (sic) del monumento al barco ubicado a la salida del aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla, para convertir este sitio en un parque temático y atractivo”.

El entonces Jefe de Estado Mayor agregó que “Las obras civiles consisten en la construcción de una plazoleta de banderas, una tarima dentro del barco, la colocación del empotrado, los mástiles y la izada de la vela ‘Colombia es Pasión’, donada por el Buque Escuela ARC Gloria”, para concluir agregando que: “se colocarían, reflectores, anclas, réplicas de boyas, bitas, cadenas y aspectos marineros”.

El artículo ilustrado con imágenes de los infantes de Marina trabajado en,4esa sí, restauración del monumento –que todo interesado podrá leer siguiendo el enlace publicado al final de esta nota– concluía con una significativa frase: “Este monumento recuperado, será la primera vitrina que podrán disfrutar los turistas al ingreso a las islas”.

Y a decir verdad, la reinauguración se realizó el 30 de noviembre de ese mismo año celebrando el Día de San Andrés, con el beneplácito o al menos, la aceptación de la comunidad ¿Qué ocurrió de esa fecha para acá? ¿Por qué razón la anunciada ‘adopción’ por cuenta de la Armada Nacional no se sustentó en el tiempo? ¿Quién debía hacerse cargo del mantenimiento de la criatura?

Ese es un interrogante vital que sólo pueden revelar la respetada institución guardiana de los mares o la entidad territorial. Sin embargo, lo que sí queda claro, es que desde hace años ese monumento tiene padrinazgo oficial y mal pueden venir ahora los defensores de oficio a reivindicar esta operación como una heroica acción de rescate, cuando la (alegórica, pero patente) ‘inasistencia alimentaria’ ya estaba configurada.

Para los desmemoriados o los que simplemente nacieron o llegaron después, el ‘Monumento al barco’ fue ordenado en 1993 por el entonces gobernador Simón Gonzalez Restrepo como un homenaje a los navegantes isleños. Sabios capitanes de goletas a vela, sin motor ni mucho menos GPS. Ese fue el espíritu de la obra y el que debería perdurar por su bella y pacífica inspiración ancestral.

Si los más curiosos hurgan en la historia, de seguro hallarán más ejemplos de marchas y contramarchas en este oficio de adoptar espacios públicos para luego abandonarlos y más tarde volver a ‘rescatarlos de la desidia’, eso sí, con licencia para desnaturalizar su idea original.

Vea también: http://www.xn--elisleo-9za.com/index.php?option=com_content&view=article&id=2957:armada-nacional-adopta-monumento-al-barco&catid=60:actualidad&Itemid=96

Última actualización ( Domingo, 23 de Julio de 2017 07:58 )