¿Un Joker en la Reserva Seaflower?

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JORGE.SANCHEZ

La impactante película ‘Joker’ que se estrenó hace unos días, ha traído diversos puntos de vista, en especial porque durante muchos años se ha subestimado la salud mental de la población; un tema agravado por la intolerancia e ignorancia por parte de la sociedad.

El personaje principal de la cinta, quien se autodenomina el ‘Joker’, es un claro ejemplo de qué tan distorsionada se encuentra una sociedad; abre los ojos sobre la falta de empatía en la cual estamos viviendo en la actualidad.

Las islas que integran la Reserva de Biosfera Seaflower, que debieran ser digno modelo de desarrollo sostenible, también cuentan, a mi juicio, con sus propios ‘Joker’.

La diferencia podría estar en la respuesta al detonante; aquello que motiva a una persona a actuar de determinada manera. Hasta la locura tiene algo de lógica, piensan algunos, porque el protagonista ha sido violentado desde su infancia y su cambiante actuar, es un acto explosivo ante sus necesidades como sujeto.

¿Han tenido algo de Joker aquellos ambientalistas asesinados por denunciar o por oponerse a las pretensiones del gamonal; o el cacique indígena que defiende su territorio ancestral?

¿Acaso lo son, aquellos privados de la libertad acusados de desobediencia civil, por reaccionar en contra de “la inacción climática de los gobiernos”, como lo fue hace pocos días el filósofo Jorge Riechmann en Madrid? ¿O como los cientos de ciudadanos en Ecuador, que se oponen a las medidas de austeridad que propone el presidente Lenín Moreno?

En ese orden de ideas, hay quienes también cuestionan a los que no están de acuerdo con el maltrato animal o de los niños, con la contaminación del agua o del medio ambiente en general; que luchan en contra de la corrupción, la injusticia e inequidad. En fin, a una ‘humanidad’ que poco hace uso del verdadero significado de esa palabra.

Poniendo lo anterior en el contexto local, en una Reserva de Biosfera que se dice por y para la humanidad; con una comunidad aquejada por una ‘enfermedad’ generalizada, donde se habla de objetivos de desarrollo sostenible mientras ondea la crematística entre su bandera albiceleste, poniendo en juego la conservación del medio ambiente y el futuro de los más jóvenes… ¿tendremos algo de Joker algunos de nosotros?

 

Última actualización ( Domingo, 13 de Octubre de 2019 08:50 )