La vida, al igual que una carrera, no se trata únicamente de quién cruza primero la meta, sino de cómo nos ayudamos mutuamente a avanzar. La historia del corredor keniano Abel Mutai y el atleta español Iván Fernández es un poderoso recordatorio de los principios que deben guiar nuestras acciones, no solo como individuos, sino también como comunidad.