De cara a las elecciones regionales del próximo 29 de octubre, el candidato a la Gobernación por el movimiento Alianza por el Archipiélago, Erlid Arroyo Newball, dialogó con EL ISLEÑO sobre sus planes a desarrollar en caso de ser elegido. Maritorio étnico, sostenible y equitativo planificación territorial, educación para el presente y futuro, economías diversas y circulares, infraestructura pública para la vida social y comunitaria; algunos de sus pilares de campaña. Entrevista.
El aspirante, que aparece de primero en el tarjetón electoral, explicó que Alianza por el Archipiélago está integrada por los partidos Verde, Colombia Humana, Esperanza Democrática y Comunes, así como por otros movimientos y fuerzas vivas del departamento que no tienen aún personería jurídica.
¿Quién es Erlid Arroyo Newball?
Soy un isleño, nacido en Providencia, administrador de empresas y especialista en gerencia de proyectos de la Universidad Nacional de Colombia. Tengo otras formaciones transversales, que hacen parte de mi vida y de mi amor hacia el mar, al ser instructor de buceo y pescador activo, dedicándome a ello actualmente en mis ratos libres.
Me he desempeñado tanto en el sector privado como en el público, casi siempre en cargos de dirección y como asesor. En el primero, fui empresario en agencias de viajes y centros de buceo; en lo segundo, jefe de fomento agropecuario y pesquero en Providencia, y más adelante, junto al entonces alcalde Raúl Huffington (año 2001) emprendí el reto de sanear las arcas del municipio, que se acogió a la Ley 505 (de ajuste fiscal). Luego de esta reestructuración, me convertí en jefe de Presupuesto.
También fui secretario departamental de Agricultura y Pesca, sacando adelante proyectos importantes, algunos de la mano de otras instituciones y organizaciones, como fue la Expedición Científica Seaflower. Además, logramos atacar de frente la pesca ilegal que no era conveniente para los ecosistemas marinos; y apoyamos proyectos de recuperación y siembra de corales.
Igualmente, fungí como secretario de Deportes (2019), y logramos traer el fútbol profesional a las islas (equipo Real San Andrés), en una acción conjunta con la Liga Departamental de este deporte, visionándolo de forma diferente para que nuestros jóvenes pudieran mirarlo no solamente a nivel recreativo sino profesional.
También intentamos eso cuando trajimos otras disciplinas deportivas, con eventos internacionales como Oceanman, el campeonato de apnea, entre otros.
En lo concerniente al desarrollo social y de actividades altruistas, fui presidente del Club Rotario y director de la fundación Pro Archipiélago, que asumió un reto significativo después de los huracanes Eta e Iota.
Algunas propuestas de gobierno
Con respecto a su programa de gobierno, el candidato lo fundamenta en los siguientes ejes estratégicos:
- Maritorio étnico, sostenible y equitativo, porque buscamos proteger el medio ambiente y poder hablar de ‘justicia social’, puesto que cuando nos referimos a la población étnica, debemos hacerlo en lo que atañe a recuperar y cuidar a esta comunidad que hoy mismo se ha convertido en minoría, dentro de su mismo territorio.
También debemos hablar de una mejor planificación y ordenamiento territorial adecuado, para poder pensar en la sostenibilidad; de control, para poder garantizar una calidad de vida; y de sobrepoblación, un factor que definitivamente nos está matando.
Es importante además, poner sobre la mesa la temática de género y mujer, de los pobladores con discapacidad, y de otros seres vivientes que también necesitan un trato digno y ser respetados, como son los animales.
- Fundamental también hablar de nuestros hijos e hijas: educación para vivir el presente y poder asumir el futuro; hablar de cultura e identidad; y de una convergencia regional, ya que no hay un norte en común ni siquiera entre los actores económicos y sociales que estamos instalados en este territorio.
- Encaminar una administración pública transparente, y con ello hago referencia a la corrupción en el departamento, que es otra de las raíces de los problemas aquí.
Necesitamos un Gobierno más eficiente, con procesos de planificación claros, de acuerdo al marco jurídico por el que se rige este departamento, que es especial por nuestras limitaciones en tierras, la presencia de ecosistemas frágiles y del pueblo étnico que lo habita.
- Debemos apuntarle a las economías diversas y circulares, entendiendo que a la isla todo entra pero nada sale. Trabajar para diversificar el turismo, el cual debe pensarse como algo distinto al sol y playa, y proyectado hacia lo deportivo, ecológico, científico y de salud.
Lo anterior, también se puede ligar al fomento de la independencia económica por medio de las asociaciones de economía solidaria, gestionando la entrega de recursos para el fortalecimiento de las microempresas y propendiendo por el pago de un salario justo.
- Otro de los ejes de mi propuesta es la infraestructura pública para la vida social y comunitaria, debemos hacer más atractivo este territorio, con mejor infraestructura pública, ornato y un buen plan de manejo de servicios públicos y basuras, recuperando también la infraestructura ya existente. Proponemos implementar acueductos comunitarios en distintos sectores, mediante una red de cisternas que la misma comunidad pueda coadministrar.
Dentro de esa recuperación de la infraestructura, también se incluye lo educativo, como es el caso del colegio Cemed que tenía una vocación agropecuaria y de una u otra manera estaba apuntándole al relevo generacional en estas prácticas ancestrales para garantizar seguridad alimentaria.
Es fundamental, además, pensar en una infraestructura acorde a la crisis climática actual. No podemos seguir desarrollando proyectos que no contengan los códigos de construcción mínimos, para que sean antihuracanes y sismorresistentes.
Todo se puede hacer, aterrizados en una realidad al saber cuáles son los ingresos del Archipiélago, cuál es la proyección para los próximos años, y con una capacidad alta de gestión del gobernante de turno, para poder acceder a recursos adicionales.
Providencia, oportunidades reales
En cuanto a Providencia y Santa Catalina, allí hay particularidades muy diferentes. Allá no es tanto el tema de la sobrepoblación, sino ofrecer oportunidades reales para los jóvenes y para el resto de la población; así como generar espacios para emplear el tiempo libre o desarrollarse en temas culturales, de cine, parques o escenarios deportivos.
Apuntarle a que sea un municipio ejemplar en el manejo de energías limpias, no solamente para ser más amigables con el medio ambiente, sino para que repercuta en el bolsillo de sus habitantes.
¿Para usted, cuál es la problemática más grave que afrontan las islas?
Yo creo que la sobrepoblación, aunque más allá de este fenómeno, la raíz del problema que ha surgido en estas islas es la falta de voluntad y la corrupción; de ellas también se desencadenan muchas cosas. Inclusive la superpoblación también es un resultado de la falta de control que han tenido nuestros mandatarios, y las diferentes instituciones llamadas a ejercer esa función.
Según la norma, cuando en un territorio hay más de 1.200 personas por kilómetro cuadrado (k2), ya ahí existe sobrepoblación; y al hacer los cálculos solamente para San Andrés, donde de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) hay una población de 62.400, al dividir eso entre los 27 k2 de extensión de la isla, da un número muy superior a 1.200.
De ahí que al hablar de superpoblación, se desencadenan otros problemas sociales como la prestación de servicios públicos insuficiente e inadecuado manejo de aguas negras y todo lo demás que se debe evacuar, según esa cantidad de población.
En esa misma línea, los servicios de agua y alcantarillado son insuficientes, por lo que no hay cómo ofrecer una calidad de vida óptima.
De la superpoblación también se desprenden otras situaciones, como la sobreexplotación de los recursos naturales, la falta de tolerancia, que en muchos casos genera delincuencia; adicional a la baja calidad en la educación, cuando en los colegios se ven casos de más de 45 alumnos en un salón de clases.
Otra consecuencia es que no hay la porción de tierra necesaria para albergar tanta gente, y aquí lo conecto con la declaratoria de reserva de la biosfera, que debe propender por el equilibrio entre el hombre y la naturaleza en el espacio físico donde reside, para poder mantener la identidad de la población étnica que reside en este.
De esto se desprende, además, un desarrollo urbano desordenado y desenfrenado, sin cumplir con las normas mínimas para tener una buena calidad de vida.
Soluciones dentro de la propuesta de campaña
Siendo innegablemente que somos un territorio densamente poblado, tenemos que saber cuántas personas somos y cuánta es la carga que soportan los ecosistemas y el Archipiélago en sí mismo, incluyendo la población flotante que son los turistas.
Por ello, lo primero es hacer un estudio de capacidad de carga, para saber cuántos somos y cuánto toleran las islas, no solo en su territorio sino también en las áreas marino-costeras y en sitios de interés turístico, como los cayos aledaños.
Debemos entrar a dar soluciones en este sentido, cuando los estamos usufructuando. No podemos seguir utilizando los ecosistemas naturales, sin hacer de una u otra manera alguna reparación. Estamos obligados a ello.
De otro lado, el DANE habla que anualmente hay una proyección de un aumento del 2,2% de la población, entonces debemos dar soluciones a cómo contrarrestar esa situación; por ejemplo, con el control de la natalidad de la mano de Profamilia y la Secretaría de Salud, para acentuar los programas de prevención de los embarazos tempranos y de responsabilidad cuando los jóvenes empiecen su vida sexual, para también mitigar el tema de la superpoblación con este ítem.
Debemos, igualmente, instaurar controles eficientes para que no sigan llegando más personas a instalarse ilegalmente en la isla. Esto, implementando sistemas avanzados dentro del control y circulación de residencia, esa tarjeta de turismo debe ‘mandarse a recoger’ porque estamos en la época de la tecnología y debe hacerse a través de la huella, el iris o un chip para que los filtros sean cada vez más ágiles en el aeropuerto.
Que esos filtros estén interconectados con los antecedentes de cada persona, para que además otras instituciones puedan actuar y lograr resultados, cuando entran y salen de las islas; aunque también deben implementarse seguimientos cuando una persona ya ingresó y no cumple con la fecha de salida, debe ir a buscársele, encontrarla y sancionarla. Estamos en tan sólo 27 km2…
Lo anterior también se puede conectar con lo que ha propuesto el presidente Petro, de generar un plan de retorno voluntario, que hoy más que nunca debe aterrizarse a un proyecto real. El Gobierno Departamental está tardío en lograr una mesa, donde se sienten actores locales y también de las regiones de donde provienen mayoritariamente estas personas que se han asentado irregularmente en las islas.
Para finalizar, como candidato del movimiento que impulsó la aspiración presidencial del hoy jefe de Estado Gustavo Petro, ¿qué ventajas tendría para el Archipiélago que usted saliera elegido como gobernador?
Es conveniente que esté en este momento un partido afín a la Presidencia de la República. Independientemente de cualquier candidato que llegue a la Gobernación tiene que trabajar con el Gobierno Nacional y conectar con las líneas estratégicas del Plan Nacional de Desarrollo.
En ese sentido, le conviene al departamento que ese gobernante tenga la capacidad y el relacionamiento adecuado para poder gestionar las acciones importantes desde la Administración Departamental, en pro de las intenciones y los intereses del pueblo de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Así podríamos apalancar recursos importantes de regalías, de las transferencias nacionales, y poder avanzar en acciones que están en mora en el Archipiélago, como es ese estudio de capacidad de carga, en una posible reestructuración del Decreto 2762 y de la Oficina de Control, Circulación y Residencia (Occre), porque no funciona como deseamos y sabemos que la población ha aumentado de manera exponencial aquí en las islas.
También porque hay una política exterior que es importante que avance y poder conformar una mesa entre el Gobierno y nuestros vecinos en Centroamérica, para abrir nuestras fronteras. Sabemos que las islas históricamente tenían relaciones, no sólo desde la apertura del ‘puerto libre’, sino desde mucho antes.
No significa que otros candidatos no van a poder hacer gestiones al respecto, pero es importante tener la confianza y facilitaría mucho las cosas al resultar electa nuestra propuesta.
Para concluir, solamente me queda invitar a la ciudadanía a que investigue muy bien quiénes son los otros candidatos, qué han hecho en sus vidas, cuáles son sus antecedentes, para con ello, tener un criterio más fortalecido a la hora de tomar una decisión tan importante como la de elegir al gobernante del Archipiélago para los próximos cuatro años.
