Por cuarto año consecutivo el evento universal La Hora del Planeta, logró apagar las luces en monumentos y edificios del mundo durante 60 minutos para exigir, en una acción colectiva buscando medidas enérgicas para revertir el cambio climático.
Colombia es uno de los 125 países que participaron este año en la iniciativa lanzada por World Wildlife Fund (WWF).
En 2009, fueron 87 los países que participaron, 38 menos que este año y esta vez, 56 capitales nacionales suspendieron la iluminación de todos los edificios públicos y monumentos emblemáticos, incluidas ocho de las diez metrópolis más pobladas del planeta.
En el mundo, las pirámides de Egipto y la Esfinge de Giza encabezan el listado de las 1.274 maravillas humanas y naturales que permanecieron en penumbras durante La Hora del Planeta.
Otras fueron la Torre Eiffel, el Arco de Triunfo en París, el Empire State en Nueva York, el puente Golden Gate en San Francisco, el Cristo Redentor en Río de Janeiro, el obelisco de Buenos Aires, la Acrópolis en Atenas, el Palacio de Edimburgo, el Opera House en Sydney, las cataratas de Victoria en Zimbabue y las del Niágara en los Estados Unidos.
La Hora del Planeta surgió en Sydney, en 2007, cuando dos millones de personas se sumaron a la iniciativa para reclamar medidas profundas y urgentes para detener el cambio climático. En 2008, más de 50 millones de personas en 400 ciudades apagaron sus luces. Y el año pasado fueron cerca de 1.000 millones de personas en más de 4000 ciudades las que adhirieron a la iniciativa
Ciudades como París, Londres, Pekín, Moscú Sidney, Bombay, Atenas, Río de Janeiro, Nueva York, Washington, Quito, Bogotá, San José y Buenos Aires quedaron a oscuras con un sólo propósito: cumplirle a la organización ecologista Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), que así busca concienciar sobre la gravedad del cambio climático.
"La acogida dada a la Hora de la Tierra fue inmensa. La tasa de respuesta es muy superior al año pasado", afirmó el fundador del movimiento, Andy Ridley.
EL PLANETA (Efe-Reuters-AFP)