Por descuadernado texto fechado 17 de julio de 2020 titulado: “La secretaría de educación anuncia el NO regreso a clase presenciales” (sic), nos enteramos de algo que se veía llegar, aunque se antojaba que no ocurriera. Curiosamente, durante su programa del miércoles 15 de julio, el gobernador no se refirió al tema, quizás considerando de poca importancia cerrar la Escuela por un año. ¿Quién lo iba a notar? Como en el box, un-uppercut perfecto.
Quienes tomaron tal decisión (directivos de Instituciones Educativas, docentes, padres de familia y secretaria de salud) lo hicieron previo “diagnóstico minucioso… (de) las variables a tener en cuenta para la estrategia de alternancia (…) por instrucción del Gobernador Everth Hawkins sjoogreen” (sic). Pareciera que el Gobierno Escolar de cada IE no fue invitado a las deliberaciones, desconociendo sus funciones.
Si nos atenemos otro texto –publicado por El Isleño.com– esas “variables” analizadas son: 1. Infraestructura insuficiente; 2. Riesgo de un gran porcentaje de docentes por sus edades; 3. La negativa de la mayoría de los padres de familia ante el regreso a las aulas físicas; 4. Significativo aumento de casos Covid-19 anunciados por la Secretaría de Salud.
¿Qué la infraestructura es insuficiente? A falta de datos actualizados, esta es la información oficial que proporciona el documento “Los que soñamos somos +”, en el diagnóstico del Eje Estratégico 2, un archipiélago + equitativo: “Año a año se ha ido disminuyendo considerablemente la solicitud de los cupos educativos a pesar de no tener escolarizada el total de la población en edad escolar. Sumado a lo anterior se puede observar una considerable deserción intra e inter anual (…)”. Siendo así, ¿cuál es la tal insuficiencia, señora Secretaria, si los estudiantes no regresan al colegio? ¿Qué entenderían los congregados por “gradualidad” y de “alternancia”?
También, parece, se basaron para tomar la decisión de cerrar la Escuela por el resto del año en los peregrinos argumentos de “almacenamiento y/o disponibilidad de agua.condiciones de los baños” (sic). ¿Hasta ahora se dieron cuenta que nuestras IEs carecen del servicio de agua? Descubierta esta inequidad con la Escuela, ¿por qué el gobierno no provee de agua a sus centros educativos? Y cuando construían esos megacolegios, ¿por qué no atendieron con seriedad el tema de los baños? Ante tanta indolencia la solución que hallan tras acucioso estudio es cerrar la Escuela. Un muy mal comienzo con mucho sabor a indolencia.
Pasados cuatro meses del cierre de la Escuela en el Departamento, ¿cómo irán las obras de remodelación y adecuación de su infraestructura? De la indolencia (incapacidad de conmoverse o de sentirse afectado por algo), en este caso la Educación de los niños, no es mucho lo que se puede esperar. También queda demostrado que la Educación tampoco tiene dolientes entre la comunidad.
Otro argumento esgrimido hace referencia al “Riesgo de un gran porcentaje de docentes por sus edades”. Por tanto, no se puede tornar a la presencialidad en las Escuelas del Departamento. Entonces uno se pregunta: ¿es que todos los docentes viejitos y riesgosos son de la Educación Media, por ejemplo?; ¿o lo son de la Primaria o los de Preescolar? Eso no es riesgo de Covid-19, eso se llama indolencia, además de no tener idea del significado de “alternancia”
Un tercer argumento para abstenerse a tornar a la presencialidad escolar con alternancia y gradualidad es producto de “la percepciones de los padres y estudiantes” (sic), convalidada por una encuesta que dio como resultado que “El 70% de ellos, respondió no estar de acuerdo”. ¿Fueron encuestadas las 10 mil y más familias cuyos hijos asisten a la Escuela Pública? ¿Las políticas educativas se hacen o deshacen por encuestas? Un mal comienzo para un muy enclenque porvenir.
La cuarta razón dice que el “Significativo aumento de casos Covid-19 anunciados por la Secretaría de Salud” obliga a que no haya “clases presenciales durante el resto del año en las instituciones educativas oficiales del departamento”.
Contradicen al gobernador que ha sido claro en afirmar que gracias a Dios y a su infinita misericordia, todo está bajo control y que todos los casos son importados por gente irresponsable. También contradicen las certificaciones del Ministerio de Salud que en julio 21 anunciaba que 322 municipios de Colombia (entre los que está San Andrés) están exentos o tienen muy baja afectación de Covid 19. Para rematar, mediante Decreto 076 de julio 17 de 2020, el alcalde ordenó levantar el “AISLAMIENTO PREVENTIVO Y OBLIGATORIO en el Municipio de Providencia y Santa Catalina Islas”, ¿Entonces, en qué quedamos, señora Secretaria?
De plácemes los que calificaban de asesinos e irresponsables a quienes piden el retorno a clases con Gradualidad y Alternancia. De malas los miles de niños sin Escuela.
Para concluir este amargo año bisiesto, queda pendiente el “debate” sobre la promoción escolar. Veremos.