Funcionarios especializados de la Corporación Ambiental Coralina y la Policía Ambiental atendieron el caso de una ballena cachalote neonata de 2.50 metros de largo que llegó herida a las playas de San Andrés.
El mamífero marino emplayó en el balneario donde opera el hotel Decameron San Luis, concitando la atención de turistas y residentes que se hallaban a esa hora disfrutando de un baño de mar.
Voceros de la autoridad ambiental informaron que a pesar de arribar oportunamente al sitio, la operación no alcanzó a resultar exitosa.
“El ejemplar llegó a la playa con golpes en la cabeza y presentaba sangrados en varios órganos que originaron su muerte” dijo un funcionario de Coralina a Welcome Online.
Los expertos explicaron que el cetáceo recibió una cortada profunda, posiblemente ocasionada por la propela de un barco.
