Este sábado 28 de octubre se realizó una nueva versión de ‘Trash Hood’, en el sector de Shingle Hill; esta es una campaña de la empresa de aseo Trash Busters que busca acercar a los niños –de una manera divertida– a la reutilización de los desechos, al tiempo que se los sensibiliza sobre el daño que generan al medio ambiente.
Al menos 50 niños y niñas de este sector se acercaron al salón comunal de la zona para elaborar dos tipos de recipientes –creados a partir de botellas plásticas de agua– para depositar sus dulces o cualquier otro elemento.
Funcionarias de Trash Busters ayudaron a los pequeños a cortar y pegar sus canasticas, al tiempo que se les explicaba por qué el plástico puede ser tan nocivo y porqué es importante depositar las basuras en los sitios adecuados.
Esta sensibilización fue impartida por Heidi Garnica Lever en Creole, lo cual agregó un plus a la actividad.
De esta manera se pretende cultivar en los más chicos de la isla, el sentido de pertenencia con la isla; haciendo un mejor uso de estos residuos sólidos en casa y en la escuela, al tiempo que se fomenta un crecimiento responsable con el ambiente.